Todos sabemos que la epidemia de la gripe porcina ha causado graves daños a la economía de México, lo cual sumado a la debacle económica mundial y rebaja de las remesas, el conjunto ha sido desastroso. Lo interesante y ejemplar ha sido la reacción de las empresas turísticas mexicanas y los mejicanos en general, que nos enseñan, una vez más, la importancia del principio de unir esfuerzos, todos han dicho presente y el panorama tiene colores de recuperación.
Así deberíamos hacer en el caso de Honduras, unir esfuerzos, y una de las soluciones es el Turismo. En este sector económico no hay organismos internacionales que actúen para impedirnos visitar nuestros amigos y familiares, en fin nada ni nadie nos puede detener a que lleguen los ciudadanos del mundo democrático a decir presente, a platicar, a darse cuenta de lo que realmente sucedió y con esto apoyar la democracia y el Estado de Derecho de nuestra querida Centroamérica.
Un turista, siempre lleva a otro turista y de esa forma es que los destinos se convierten en populares y exitosos, por lo tanto, las fuerzas vivas de Honduras, deben unirse y comenzar una campaña promocional, escribiéndole a todos sus coterráneos y amigos a visitarlos.
Tegucigalpa, nos recuerda los pueblos blancos del Sur de España (Andalucía), sus cerros, sus callecitas, sus plazas que conservan su historia colonial y aquel sabor a montaña de pinos y ocotes de sus alrededores, le ayuda a preservar un clima acogedor. Es una Capital que invita a caminar por los calles de su Viejo Centro que, aunque tiene mucho tráfico vehicular para sus estrechas calles, sus aceras y pequeñas plazas siempre están llenas de parroquianos. De noche, la vista desde el Cerro Picacho, nos hace recordar aquellos pueblecitos de los nacimientos navideños.
No olvidemos que el huracán “Mitch”, en 1998, contribuyo al desborde del río que cruza Tegucigalpa, causando muchos daños, especialmente a Comayagüela., el sector más pobre de la metrópolis, pero hoy, 10 años más tarde, toda la ciudad tiene una nueva cara y además, buenas carreteras hacia sus alrededores, donde hay pueblos coloniales, tales como la primera capital del país, Comayagua, y el Parque Nacional “La Tigra”, un precioso paraje donde uno puede pernoctar y hacer turismo ecológico caminando por sus senderos.
Si a lo anterior les sumamos San Pedro de Sula, la ciudad comercial e industrial, donde se aprecia el espíritu emprendedor del hondureño, las famosas ruinas de Copan, donde se percibe el espíritu bravío y culto de los Mayas, sus extensas playas del Mar Caribe y las Islas de la Bahía (Roatán, Utila y Guanaja), debe motivarnos a un viaje de por lo menos de una semana, así que animémonos a visitar a nuestros hermanos “catrachos”, que en las actuales circunstancias, es el mejor apoyo que le podemos dar. En esta vida, las obras valen mucho más que las palabras.
El Turismo es sin duda alguna, una de las soluciones a la economía de Honduras Democrática, pero como todo, hay que promocionarlo, hay que invitar en forma directa a los millones de hondureños que residen en el exterior a visitar su lar nativo, a traer consigo ese espíritu democrático que les ha hecho triunfar en sus respectivas comunidades, ya que solo en libertad y cumpliendo con las leyes y regulaciones se puede progresar, lo cual ellos conocen muy bien.
Sé que soy como un disco rayado, que repite y repite, lo cual es verdad, ya que por más que repita, todavía no he encontrado a quienes lleguen a quitar el disco y colocar el disco de la UNIDAD, lo que nos lo demanda las circunstancias. Hablo de la UNIDAD de los hermanos que residen en el exterior, la DIASPORA CENTROAMERICANA, la cual es numerosa, pero desperdigada. Si en vez de que visiten Washington, personajes políticos y empresarios, lo hiciesen representantes de nuestras comunidades, ciudadanos votantes de ascendencia centroamericana, organizados en una Confederación, el Congreso y el Ejecutivo escucharían y tomarían en cuenta sus sugerencias, ya que todos dependen de los votos y contribuciones que estos ciudadanos representan para ser electos.
UNA ECONOMIA FUERTE Y DIVERSIFICADA GENERA DEMOCRACIA Y EL TURISMO ES FUERTE Y DIVERSIFICADO.
Así deberíamos hacer en el caso de Honduras, unir esfuerzos, y una de las soluciones es el Turismo. En este sector económico no hay organismos internacionales que actúen para impedirnos visitar nuestros amigos y familiares, en fin nada ni nadie nos puede detener a que lleguen los ciudadanos del mundo democrático a decir presente, a platicar, a darse cuenta de lo que realmente sucedió y con esto apoyar la democracia y el Estado de Derecho de nuestra querida Centroamérica.
Un turista, siempre lleva a otro turista y de esa forma es que los destinos se convierten en populares y exitosos, por lo tanto, las fuerzas vivas de Honduras, deben unirse y comenzar una campaña promocional, escribiéndole a todos sus coterráneos y amigos a visitarlos.
Tegucigalpa, nos recuerda los pueblos blancos del Sur de España (Andalucía), sus cerros, sus callecitas, sus plazas que conservan su historia colonial y aquel sabor a montaña de pinos y ocotes de sus alrededores, le ayuda a preservar un clima acogedor. Es una Capital que invita a caminar por los calles de su Viejo Centro que, aunque tiene mucho tráfico vehicular para sus estrechas calles, sus aceras y pequeñas plazas siempre están llenas de parroquianos. De noche, la vista desde el Cerro Picacho, nos hace recordar aquellos pueblecitos de los nacimientos navideños.
No olvidemos que el huracán “Mitch”, en 1998, contribuyo al desborde del río que cruza Tegucigalpa, causando muchos daños, especialmente a Comayagüela., el sector más pobre de la metrópolis, pero hoy, 10 años más tarde, toda la ciudad tiene una nueva cara y además, buenas carreteras hacia sus alrededores, donde hay pueblos coloniales, tales como la primera capital del país, Comayagua, y el Parque Nacional “La Tigra”, un precioso paraje donde uno puede pernoctar y hacer turismo ecológico caminando por sus senderos.
Si a lo anterior les sumamos San Pedro de Sula, la ciudad comercial e industrial, donde se aprecia el espíritu emprendedor del hondureño, las famosas ruinas de Copan, donde se percibe el espíritu bravío y culto de los Mayas, sus extensas playas del Mar Caribe y las Islas de la Bahía (Roatán, Utila y Guanaja), debe motivarnos a un viaje de por lo menos de una semana, así que animémonos a visitar a nuestros hermanos “catrachos”, que en las actuales circunstancias, es el mejor apoyo que le podemos dar. En esta vida, las obras valen mucho más que las palabras.
El Turismo es sin duda alguna, una de las soluciones a la economía de Honduras Democrática, pero como todo, hay que promocionarlo, hay que invitar en forma directa a los millones de hondureños que residen en el exterior a visitar su lar nativo, a traer consigo ese espíritu democrático que les ha hecho triunfar en sus respectivas comunidades, ya que solo en libertad y cumpliendo con las leyes y regulaciones se puede progresar, lo cual ellos conocen muy bien.
Sé que soy como un disco rayado, que repite y repite, lo cual es verdad, ya que por más que repita, todavía no he encontrado a quienes lleguen a quitar el disco y colocar el disco de la UNIDAD, lo que nos lo demanda las circunstancias. Hablo de la UNIDAD de los hermanos que residen en el exterior, la DIASPORA CENTROAMERICANA, la cual es numerosa, pero desperdigada. Si en vez de que visiten Washington, personajes políticos y empresarios, lo hiciesen representantes de nuestras comunidades, ciudadanos votantes de ascendencia centroamericana, organizados en una Confederación, el Congreso y el Ejecutivo escucharían y tomarían en cuenta sus sugerencias, ya que todos dependen de los votos y contribuciones que estos ciudadanos representan para ser electos.
UNA ECONOMIA FUERTE Y DIVERSIFICADA GENERA DEMOCRACIA Y EL TURISMO ES FUERTE Y DIVERSIFICADO.
Semana del 13 al 19 de julio del 2009 - Hasta EL ARCHIVO XLIX
alejandrojosesr
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