El Archivo CDXXII – Los Viajes: ¡Caja De Pandora!

Siempre hay sorpresas en los viajes y por supuesto, a los curiosos y comunicadores, las oportunidades se nos multiplican, ya que le hablamos hasta a los árboles.

Mi viaje de la semana pasada fue al este de la Bahía de San Francisco. Mi primera sorpresa fue la eficiencia y cortesía con que Aerolíneas Alaska sirve a sus pasajeros. Fue muy agradable sentirme bienvenido y atendido por la línea aérea ya que en los últimos años todas han reducido sus atenciones y servicios, como consecuencia del incremento de sus costos, lo que hace al pasajero sentirse incomodo convirtiendo el servicio en favor.

Alaska acaba de fusionarse con Virgin America, expandiendo su red a 114 destinos, entre ellos nueve en México y dos en Costa Rica (Liberia y San José). Es interesante que ninguna de las empresas de servicio a Ciudad México. Las dos compañías ofrecen muy buenos precios y un excelente servicio, lo que sin duda, ayudara a impulsar el turismo. Ojala aumenten vuelos directos desde el Pacifico de los Estados Unidos a un par de destinos más en Centroamérica.

La segunda sorpresa fue el moderno Aeropuerto de Oakland, con fácil acceso a San Francisco y las 442 comunidades situadas en una extensión territorial de 20 mil kilómetros cuadrados, unidas por las otrora excelentes autopistas californianas que la pasada administración de Arnold Schwartznegger descuidó y que el Gobernador Brown está rehabilitando. Escoger aeropuertos como Oakland, ofrece mejores precios de las líneas aéreas, ya que no tiene los costos de San Francisco y San José y el proceso de entrada y salida de aeronaves y pasajero es más rápido.

La poblados de la Costa Este de la Bahía de San Francisco, son el "dormitorio" de los trabajadores y profesionales que prestan servicios en ciudades del lado Oeste, donde está el famoso Silicón Valley y universidades de gran prestigio como la del Estado de California en Berkeley, Stanford en Palo Alto, Santa Cruz en San José y las de los Jesuitas (Santa Clara y San Francisco) entre otras. Esto por los costes de alquiler y valor de las casas, también impuestos inmobiliarios más bajos. No hay grandes "malls", pero si centros de compras agradables, construidos a lo largo de las calles principales dentro de zonas verdes en las ciudades como Alameda, San Leandro, Castro Valley, Hayward, Liverpool y otras, logrando un ambiente amistoso y de fácil acceso en automóvil, además cuentan con amplios espacios de estacionamiento.

Las residencias últimamente están aumentando en áreas de construcción y están ubicadas en la región montañosa, debido a que las familias requieren de 3 dormitorios. Aunque han sufrido problemas por la larga sequía, está en un proceso de reforestación admirable, aunque todavía no se permite irrigar los jardines.

La razón de mi visita a esta área fue mi hermano Fernando Abel, que está en el Hospital Kindred de San Leandro, especializado en pacientes que requieren de largos periodos de recuperación posterior a alguna intervención quirúrgica, recibiendo pacientes de toda la Bahía de San Francisco. El Hospital está construido en uno de los cerros de la ciudad, que lo hace acogedor, y no hay ninguna actividad comercial en sus alrededores. Fernando Abel ingreso procedente del Hospital de la Universidad de Stanford, donde a sus 87 años le extirparon exitosamente un cáncer en el páncreas, la intervención es clasificada como un triunfo de la ciencia quirúrgica moderna.

Durante estos días tuve el honor de estar acompañado del amigo nicaragüense, Ingeniero Guillermo Nóffal-Zepeda, residente de San José a unas 2 horas en autopista, que por lo general permanecen atestadas de autos y camiones, lo que me ayudo a convercele de tomar unas vacaciones en el Hotel Comfort INN, ubicado en Castro Valley Boulevard, principal Calle de la ciudad del mismo nombre, a unos 10 minutos del Hospital. Sin el padrinazgo del Ingeniero, no hubiese podido desplazarme y conocer tantos rincones atractivos de estos pueblos, lo que una vez más demuestra el espíritu fraternal que distingue al centroamericano en el exterior. Gracias, Guillermo!

Lo más interesante en esta semana ha sido conocer y platicar con inmigrantes (un arco iris de razas) que trabajan en los hospitales, hoteles, restaurantes, tiendas, bancos, etc… de estos pueblos, sin cuya presencia laboral y profesional, no se hubiesen podido desarrollar. Por supuesto entre ellos abundan latinoamericanos que han procreado familias en los veinticinco y más años que tienen de residir en esta área. Dicen que si se declarasen en huelga los trabajadores de los hoteles y restaurantes del área, las pérdidas de la industria del turismo serian catastróficas.

En el "Comfort INN" la mayoría son de ascendencia mexicana, pero logramos conocer a una nativa de Diriá, Granada, Nicaragua, así como en otros lugares a hondureñas y guatemaltecos. Dos hondureñas que conocimos son un ejemplo de esfuerzo, las dos luchan en sus pequeñas empresas, una industrial y la otra de servicios, lo cual nos acierta que si le brindamos oportunidades al inmigrante, seguiremos creciendo como un país donde se hace realidad el "pursuit of happiness"

Hasta el próximo domingo 29 de mayo, desde este paraíso de verdes y azules de mar, Seattle y sus alrededores.