Los domingos son días de fe, pero sin importar días, "la fe salva" y ese es el mensaje del recién electo presidente de Guatemala, Jimmy Morales, quien tiene FE, fe, en el bien, en combatir el mal y la corrupción, culpables de tanta pobreza y falta de progreso tantos países del mundo en desarrollo.
El pasado domingo, 25 de octubre de 2015, día que la fe de un hombre sencillo pero instruido, luchador y honesto, venció en las elecciones presidenciales, e inició su cruzada por darle a Guatemala esperanza y espíritu de lucha. Cuando un corresponsal del diario español "El País" le pregunta cuál será su primera medida al asumir, contesto sin titubear: "luchar para conseguir que los hospitales tengan medicinas", ya que medicinas es lo que nuestros pueblos necesitan, pero no solo medicinas para curar enfermedades, sino medicinas para eliminar la "corrupción", que según él y nosotros, es el meollo de nuestras enfermedades y carencias.
Nuestros países necesitan de "comediantes" o sea de actores, para que entre broma y broma vayan penetrando la mentalidad de nuestros pueblos y los despierten de la pesadilla en que los mantienen la mediocridad de sus corruptos líderes políticos.
Dice el artículo que Jimmy es "el líder antisistema, el huracán que desde la nada ha derribado a los partidos tradicionales y sacudido Centroamérica". El sacudón comenzó cuando ese valiente pueblo, usando sus armas cívicas y democráticas, desaforó y encarcelo a dos corruptos, el presidente y vicepresidente anterior.
Jimmy recibió una abrumadora mayoría de votos y le dice al periodista que se siente anti clase-política porque: "hay demasiados focos contaminados en el sistema, demasiada podredumbre"
Sobre su ubicación política declara: "Soy de centro y nacionalista, tal vez centro-derecha, porque creo mucho en el desarrollo económico a través de la empresa" y aquí viene lo que tanto necesitamos, hablando de impuestos: "deben ser invertidos en educación, salud, seguridad, justicia e infraestructuras".
En cuanto a sus principios de "Dios, patria y honor" comenta que "el 93% de la población guatemalteca es cristiana fuerte y que casi la mitad de ellos son evangelistas que van tres o cuatro veces a la semana a la iglesia". Un mensaje directo a la Iglesia Católica y una de las preocupaciones de papa Francisco, el acercamiento de la Iglesia al pueblo.
Dice que, como Jimmy Morales, pone a Dios por encima de todo, "Pero como presidente de la República estoy obligado a respetar la ley sobre todas las cosas" otra lección que "el cómico" deja a sus colegas latinoamericanos al costo.
Continua el corresponsal con preguntas sobre la homosexualidad y el aborto a lo que contesta que él cree en la libertad de conciencia… sin ofender el derecho de otra persona, que la vida comienza en la concepción y hay que respetar el derecho a la vida, pero entiende los casos extremos, como la violación de una niña o el riesgo para la madre, y eso es lo que lo distancia de la derecha extrema.
Le pregunta sobre que considera más grave, violencia, pobreza, narcotráfico o corrupción, su respuesta es contundente: "La corrupción".
¿Por qué?, –insiste el periodista– "Porque es la razón por la que estoy en política y su combate es mi ofrecimiento de campaña. Si logramos sanar los problemas de corrupción que hay en Guatemala, tendríamos recursos para combatir el narcotráfico y para dar seguridad".
"Es posible..." le contesta y habla de su caso "Yo nunca estudié arte, ni actuación, ni dirección de cine, ni producción. Simplemente la experiencia y la vida me fueron conduciendo. Y realicé proyectos con éxito. He sido una persona con liderazgo. La misma campaña es una prueba. Con poco recursos se logró un liderazgo genuino."
Le insiste en que si es consciente de que ha ganado por el voto de castigo, a lo que le contesta: "He ganado por el voto de castigo y por el voto de fe. Hay un porcentaje muy alto de votantes de 18 a 23 años que han ido a las urnas por primera vez y que han confiado en alguien a quien vieron en la televisión. Me han dicho comediante, y es cierto, pero también soy moralista. Hay un voto de esperanza, de gente que me creyó… que saben que, a diferencia de la clase política, no nací en una cuna de oro y que lo poco que tengo lo he sudado."
A la pregunta de ¿le han tentado en campaña? responde que mucho y le han ofrecido dinero y a todos les ha dicho que NO, y no los denuncia, porque no hicieron nada ilícito, y es que no me creo que ofreciesen el dinero por buena gente. Un intercambio sin tapujos. Un hombre publico honesto consigo mismo.
Y para cerrar, le preguntan: ¿puede haber otros Jimmy Morales en Centroamérica? "No quisiera generar tanta expectativa en Jimmy Morales. Él no es el cambio. Es un elemento más. Darle esa preponderancia es excesivo." He allí la diferencia con el político populista e irresponsable. Le deseamos suerte y que Dios lo proteja, ya que como creyente sabe que es humano y que es solo un factor en el cambio.
Hasta "El Archivo" próximo, el domingo 8 de noviembre, desde el solar donde nací hace 90 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario