EL ARCHIVO LXXIV – TURISMO

EL ARCHIVO LXXIV – TURISMO

Alejandro Jose Gallard Prio

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El pasado sábado 9 de enero de 2010, leí en La Tertulia Villera, la revista semanal cibernética, dirigida por Bruno Juan Alvarez Abreu, de Tenerife, Las Islas Canarias, un articulo de Don Celestino González Herreros, intitulado:  DEJEN PARA LOS ENTENDIDOS EL ASUNTO DEL TURISMO, del cual, por ser un escrito que calza a la medida los problemas de casi todos los países del Continente Americano, he decido comentarlo.

Dice el articulista, que “De nada sirven tantos proyectos si no están orientados por hombres que hayan dedicado toda su vida al servicio de esa importante asignatura industrial y a la vez social. Hombres que hayan comenzado desde muy temprano a darlo todo por ese delicado sector laboral; y aprendieron, viviéndolo intensamente, casi todos sus secretos. Sobreviviendo, a veces, en medio de turbulentas situaciones...”  Este párrafo nos aclara la importancia de la experiencia en esta polifacética actividad de la economía mundial, lo cual no es cuestión de años, sino de décadas, durante cuyo tiempo el empresario, el promotor, el industrial ha puesto en riesgo sus ideas y su dinero, para que venga un político, que como dice, Don Celestino, ” … no tiene la mas minina idea sobre el tema”.

Gino Luzi, Gerente General del “Gran Hotel Guayaquil” (Ecuador), es un ejemplo de esos destacados Directores de Empresas Hoteleras, verdaderos maestros, personas que desde muy jóvenes se entregaron a esa especialidad turística y que a través de los años fueron escalando posiciones hasta llegar, satisfactoriamente a lo más alto. Felizmente, para nuestro continente, hoteleros como Gino, los encontramos por todo del Continente. Casi todos ellos salieron de las mejores escuelas hoteleras de Europa, pero América les incentivó, les dio experiencia en otros rubros,  les dio una vocación y un sueño, llegando a adquirir, una doctorado en Turismo, que los hace ser los expertos por excelencia. Como nos dice, Don Celestino: “….son personas entregadas al trabajo, que sacrificaron sus propias vidas y la de sus familias, por querer estar allí, ordenando en sus respectivos despachos los proyectos ilusionados de un futuro más alentador para su empresa y cuantos trabajaban en ella. También era una forma de agradar a los clientes y transmitir a ellos un mensaje de confianza y afecto que se llevaban consigo a sus lugares de origen, cuando no había dinero para gastarlo en propaganda turística en el extranjero y sólo era válida nuestra reconocida conducta profesional”.

Y nos advierte González Herrero, refiriéndose a España, “Hoy día la situación ha cambiado bastante. Disponemos de Escuelas de Turismo, tan acreditadas como las mejores, que muchos jóvenes han sabido aprovechar y de las que han salido buenos profesionales, tantos de los nuestros como del extranjero. Con suerte se va avanzando mucho en este capítulo, pero faltan las directrices con experiencia y honradez capaces de enderezar esta viga retorcida de tanto manosearla manos inexpertas”.

La crítica es beneficiosa, cuando va acompañada de una solución y en este caso, la solución esta en manos de la empresa privada y sus Cámaras Nacionales de Turismo. En turismo, se necesita, por sobretodo, de confianza, reputación y continuidad. Los que representan a los usuarios, son empresarios privados, así como los hoteleros, restauradores y  operadores, por lo que les he más confiable negociar con sus pares, ya que les conocen, en muchos casos, hasta por generaciones.

Debido a lo anterior, sugiero que la Cámara Nacional de Turismo, amplíe sus actividades, creando una Oficina paralela de Promoción y Ventas, que bien podría llamarse “Buró de Convenciones y Visitantes”. Estas actividades, pueden operar paralelamente, a cargo, cada una de ellas, de un Director Ejecutivo y bajo el paraguas de un Consejo Directivo Nacional.

De esta forma, la Organización gubernamental de Turismo, apoyaría económicamente a la Oficina de Promociones y Ventas de la Empresa Privada,  quien a su vez le presta a la comunidad un servicio profesional, contando para ello, con lo más importante en este negocio, la continuidad, lo cual no es posible en Oficina de Gobierno, donde los cambios que demanda la política, no lo permite.

De la forma anterior, el Ministerio de Turismo, se mantiene como el regulador de la Industria y sus servicios, el fomentador de su infraestructura, en cuyo rubro hay mucho por hacer y por sobre todo, el organismo que incentiva  inversionistas, poniendo en práctica las leyes y regulaciones ya existentes, con el aval de la Oficina de Ventas y Promoción, que operaría la empresa privada.

Con una Oficina independiente, autónoma le dicen los gobiernos, Nicaragua lograría en corto tiempo, ganar la confianza de los compradores y buscadores de destino, al ofrecer estabilidad, calidad y seguridad, que en los negocios, solo el empresario puede ofrecer.

Panamá, Costa Rica, Honduras y El Salvador, están aumentando considerablemente su infraestructura hotelera,  más de 200 millones de dólares, lo que nos deja a nosotros muy en la cola. Algo esta fallando en nuestra promoción y ventas como destino, lo cual se puede mejorar con un Buró de Convenciones y Visitantes, bajo el ala de la Cámara Nacional de Turismo.

"La Sociedad de Ciudadanos Americanos en Nicaragua" 

"The Society of American Citizens in Nicaragua",

 Se hizo realidad ayer Sabado 16. Felicitaciones!

Hasta EL ARCHIVO LXXV.