El Archivo DCCCLVIII

El Sentido Común

En un mundo donde el "jódete" es la orden del día, comparto con vosotros opiniones que he encontrado sobre "el sentido común", comenzando con Google: El sentido común "se adquiere por medio de la experiencia y a través de los sentidos, de una manera espontánea, dispersa, acrítica y convencional", y continúa: "Reflexionando, que, para comenzar, muy pocos hacemos, para saber qué es lo más adecuado y realista de lo que sucede".

Razonar, ante cuestiones de lógica elemental, sería el mejor aliado del sentido común. El problema es que algunos sólo razonan para sumar y restar, y esto a veces.

María Elena López Jordán, psicóloga colombiana de la Universidad Javeriana, quien ha publicado numerosos libros, en un escrito para el diario colombiano El Tiempo, nos dice que "su trabajo, incluye hablar con muchas personas y dictar conferencias y talleres, y que cada vez hay más respuestas sofisticadas, elaboradas, comprobadas o también fáciles, pero dichas por otros, a los problemas de la vida diaria".

Y continua "En estos tiempos la expresión ‘el sentido común’ es el menos común de los sentidos".

Las definiciones técnicas coinciden en afirmar que el sentido común está asociado a la inteligencia reflexiva, es decir, la capacidad mental para hacer frente a los retos y oportunidades de la vida. Se trata de poder ver una situación con simplicidad, aplicando la experiencia al contexto de manera constructiva y positiva.

Vale la pena aclarar que no siempre las personas inteligentes actúan con sentido común, por ejemplo, aquellos que apoyan a un delincuente, con 91 casos judiciales, ahora convertido en líder del partido republicano (conservador) de Estados Unidos, y que además apoyan la "obsoleta" existencia de un Colegio Electoral que tiene la potestad de elegir al Presidente de la República con solo 238 votos, en una nación donde votaron casi 160 millones de ciudadanos en 2020.

Todos, gobernantes y gobernados, debemos preguntarnos si lo que pensamos, sentimos y hacemos es procedente, razonable y/o saludable, o si más bien, está contraindicado, es injusto o perjudicial, o incluso absurdo, como eso de prohibir procesiones religiosas durante la cuaresma y "Semana Santa", períodos en que los cristianos buscan respuesta al sentido común de la vida, y otros se divierten y conviven con amistades que sus ocupaciones no les permite ver con frecuencia, en fin, es una semana de tradiciones y costumbres, lejos de la política partidaria, pues la religión es un alimento espiritual que todos necesitamos.

Permitir que China construyese en Nicaragua un Centro Comercial (Mall) en Managua y una tienda para sus productos en Matagalpa, no solo carece de sentido común, sino que es absurdo, cuando sus productos ya son vendidos en comercios individuales en ambas ciudades, ya que es una competencia desleal para los comerciantes nacionales.

Es necesario que los ensimismados gobernantes y sus asesores controlen esos pensamientos irreflexivos, que les hace perder el control que se necesita para gobernar, ya que la historia nos recuerda que, al promover que los pueblos gocen de sus tradiciones en vez de prohibirlas, se logra convivencia, la que nos beneficia a todos.

En cuanto a los problemas a nivel mundial, no tiene sentido común la negación de Israel a parar su inhumana destrucción de Gaza, ni el empecinamiento de la Rusia de Putin en desmembrar Ucrania. Y lo más triste y carente de sentido común es que, los que podrían detenerlos, les suplen dinero y armamentos letales con lo que asesinan a niños en Gaza.

Instamos a que Estados Unidos, en vez de enviar delegados que no logran detener la barbarie, paren toda ayuda a los líderes rabiosos de Israel, que desprecian la paz que si es posible, si usaran el sentido común, y aquí nos permitimos parafrasear al sabio Don Quijote, de Cervantes y Saavedra: "Pacificar el mundo, amigo Sancho, no es locura, ni utopía, sino justicia."