domingo, 6 de febrero de 2022

El Archivo DCCXLIV

¡La Verdad!
La verdad alimenta tu mente de esperanza, o sea de vida, por ello es importante la unión familiar, ya que desde nuestra infancia la mente recibe el mensaje de Jesús: ¡solo la verdad os hará libre!

La semana pasada un grupo analizaba el "por qué no salimos del miasma que carcome a los países en desarrollo", yo por supuesto que resalto la ciencia de la educación, muy sencillo pero irreal, ya que la enseñanza, aunque es vital, no fructifica sin una mente acuciosa y abierta, y eso solo se logra con los consejos que recibimos en nuestra niñez, de nuestros padres.

Para aprender en la Escuela, hay que llegar con la mente sana, limpia de complejos, una mente con la fuerza de un hogar amoroso y protector, cohesionado. Un hogar donde en los primeros años de vida se aprende a decir papá, mamá, a dar sus primeros pasos. Si no recibes apoyo y no escuchas palabras de amor, creces en la neblina de la soledad, sin cariño ni afecto, sin fuerza, sin protección, lo que te convierte en rebaño.
Aquí cabe un triste acontecer histórico que una socióloga amiga me recordaba: "los chinos cuando estaban diezmando su crecimiento, enviaban a los infantes a orfanatos, con instrucciones precisas de cuidarlos y alimentarlos, pero enfáticamente, sin demostrarles en ningún momento cariño ni afecto, ya que el ser humano, sin afecto, muere", lo que lamentablemente sucedía.

En nuestros continentes, felizmente, no llegamos a esa aberración, pero si los convertimos en "rebaño", que aprovechan los corruptos populistas de todas las corrientes que anegan nuestro mundo, a los que podríamos identificar como mercenarios de ideologías que ellos mismos reforman y ajustan a su conveniencia del momento, son "mentes de carnaval, donde solamente hay verdades alternativas" como dice nuestro ilustre coterráneo, Leonel Arana, quien añade que "todo lo ven del color del cristal a través del cual leen en el momento".
Todo lo anterior, pone en peligro nuestro sistema democrático, por lo que Antonio de Roux, columnista del "El País" de Cali, Colombia, dice que "Necesitamos de Pasión, para salvar la democracia", ya que "La defensa de la democracia ante el populismo radical de izquierda o derecha necesita de la emoción y la pasión… Sin injurias, ni amenazas; sin incitaciones a la violencia, pero con claridad y contundencia", que El Archivo ratifica, ya que "emoción y pasión" solo se logra con la verdad.

La semana pasada elogiamos el plan social de la cadena de restaurantes y heladería colombiana "Crepes & Waffles", al darle preferencia a las madres solteras, cabezas de hogar, lo que nos lleva a la raíz del problema, la falta del padre, la falta del hogar.

He aquí nuestro mal, la educación, de por sí, mediocre y sin responsabilidad social, necesitada de maestros responsables, sin temor a buscar y enseñar la verdad, o sea la libertad de "Pensar y Actuar" y no actuar sin pensar.
De Carlos A. García, erudito nicaragüense que reside en Toronto, Canadá, sacamos los pensamientos para redefinir la verdad, o sea que "Lo importante es reconocer lo que es el 'Respeto Mutuo' y el 'Respeto a sí mismo'… el Maestro debe enseñarnos a pensar y a analizar qué relación tiene lo que leemos o escuchamos para el bien de todos, no solo el nuestro, porque el de todos incluye, verdadera y en forma más segura el nuestro".

Y el Presidente mártir, Abraham Lincoln, fundador del Partido Republicano, en el que algunos de sus miembros, persisten en confundir a la ciudadanía con falsedades, nos legó su pensamiento sobre el valor de la verdad, al asegurarnos "Yo soy nada, la verdad es todo", así como "Debemos aceptar la verdad, aunque esta pueda no sernos propicia".

¡Aprendamos la lección, consolidemos hogares y con ello, abramos nuestras mentes a la verdad!

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