El Archivo DCI

¡Es Imperativo Reclamar REPARACIONES!

Antonia Urrejola, Relatora para Nicaragua de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, comenta en diario "El Nuevo Diario" de dicho país sobre las resoluciones de la Corte de esa institución, en cuanto a Reparaciones pendientes de los abusadores regímenes de Latinoamérica, por lo que recomendamos a los Bufetes Legales de los países donde los Gobiernos y las mal llamadas revoluciones, han asesinado, torturado y apresado a sus connacionales por ejercer sus derechos civiles, de comenzar a documentar y presentar demandas pecuniarias a nombre de los familiares y víctimas de aprisionamiento, tortura y asesinato, que sentaría un precedente de que la vida y los sufrimientos tienen además un valor pecuniario intrínseco, al cual deben responder los responsables, en forma particular, y el Estado, por ser el vehículo usado para los crímenes.

Ya es hora de recuperar legalmente todo ese dinero mal habido por corruptos gobernantes y su paria de adeptos, y con él, resarcir pecuniariamente los abusos inhumanos sufridos por quienes han luchado por una gobernabilidad responsable y respetuosa de los derechos de los pueblos a vivir en libertad y bienestar.

Nunca en nuestra historia republicana se ha castigado ejemplarmente a los "abusadores", que si bien pierden el poder de mando y una que otra de sus mal habidas pertenencias, no se les ha tocado el "Dinero" sucio, que debe ser perseguido y rescatado a través de exhaustivas investigaciones de las Cortes Internacionales. Es necesario que terminemos con la "impunidad" que han aprovechado cientos de "gánsteres políticos" para rehacer sus vidas con esplendor alrededor del mundo, inclusive en países democráticos, donde deberíamos ser más cuidadosos a quienes admitimos a gozar de seguridad y legalidad.

A través de nuestras tristes historias políticas hemos sido indolentes con quienes han amasado fortunas robándole al erario público, hemos visto con indolencia como herederos de estos corruptos funcionarios, reclaman propiedades y bienes que todos sabemos han sido mal habidos. Esto tiene que terminar. La democracia no es complacencia, es un sistema de gobierno en el que todos estamos comprometidos a respetar y defender. La Democracia exige justicia y es justo que lo robado sea redimido para poder cumplir con las obras sociales que no se realizaron por el hurto.

En estos tiempos no hay secretos, hay innumerables formas de conocer la trayectoria de nuestras vidas, y si estas han sido delictivas, el implicado debe ser marginado de toda injerencia en la cosa pública, pues no solo son un peligro latente, sino un mal ejemplo para los responsables de la administración de la empresa pública, un cáncer que destruye incentivos y valores. La honestidad administrativa de los bienes públicos debe ser un dogma inviolable y su abuso, castigado y perseguido hasta recuperar lo mal habido. Esta debe ser una de las principales metas de nuestra América dentro de su lucha democrática.

Los países son como las empresas; grandes, medianos y pequeños, pero todos tienen un mismo afán, desarrollo y progreso, es por esto que se han creado los entes que vigilan y/o auditan permanentemente sus administraciones, su propósito es enderezar la nave y tomar las medidas necesarias para corregir errores y abusos.

Pero todo lo anterior es inútil, si tanto los accionistas como la ciudadanía en general, ignorando las historias delictivas de los candidatos a ocupar cargos de responsabilidad administrativa, los eligen por ser agresivos y jocosos. Es aquí donde la ignorancia se convierte en irresponsabilidad cívica, pues generalmente dicen: "si no lo voy a gozar yo, no tengo por qué preocuparme". Lamentablemente en la democracia no solo votan los honestos y los responsables, sino que también ejercen ese sagrado derecho, los marginados, los iletrados y los corruptos, que por desgracia, de nuestra propia indigencia no hemos logrado educar ni ajusticiar.

La Democracia no es un DERECHO que DIOS nos regala, sino un privilegio que debemos reclamar, buscar y defender, aun con nuestras vidas, por lo anterior es que en países democráticos como los Estados Unidos, se conmemora anualmente el "Memorial Day" en honor a los héroes de su eterna lucha por la Libertad, lucha que en nuestros países continua, lucha que merece el apoyo del mundo democrático.

Si reclamásemos todo el dinero robado por funcionarios corruptos en las últimas siete décadas, así como las reparaciones por crímenes, torturas inhumanas y ajusticiamientos extrajudiciales, los gobiernos democráticos de Latinoamérica podrían recibir algo superior al famoso Marshall Plan, con los cuales se obtendrían los recursos para programas de educación, salud y protección de sus adultos mayores. ¡Vale la pena el intento!