Y como en este complejo de ciudades, se puede gozar, entre otras actividades, el simple caminar por sus limpias calles, siempre atestadas de peatones y taxis amarillos que, según doña Rosario Murillo de Ortega, Primera Dama de Nicaragua, es el color de la vida, como dicen los ticos (costarricenses) de la "pura vida", no podemos dejar de pensar en los árboles de ramas de latón y troncos de hierro amarillos, que su alcaldía managüense ha enclavado por toda la ciudad, aunque aceptamos que, iluminados por la noche, atraen hasta a los ceguetos. Pero, sólo a título informativo, les presento unos bellos árboles naturales, que fotografié en la entrada oeste de "Central Park", con el color de la "vida" que sí se verían preciosos en Managua.
Lo atractivo de New York, es que uno puede pasar un trimestre, saliendo a diario, por supuesto que gastando suelas, y siempre se encontrara algo novedoso. Hoy visite la "ciudad china" (China Town), ya se tragó al viejo "barrio Italiano", el impacto que uno recibe al solo entrar por alguna de sus calles es muy agradable, principalmente porque que el "chino", varón o mujer, sonríe como el latino, lo que le da a uno, la sensación de que es bienvenido. Por eso la relevancia que le hemos dado siempre en El Archivo a la sonrisa, pues bien, allí les va una foto, precisamente de la calle Bayard, que tiene en el fondo la Iglesia, de dónde sale todos los años la Procesión de San Genaro, y donde filmaron aquella escena simpática de la primera película de la saga "El Padrino".
En esa misma calle, encontramos una floristería que sólo la siguiente foto puede describir. Allí compre un cactus florido, que para los chinos es símbolo navideño, cuya foto también les incluyo.
A unos cuantos metros, en la misma calle, compre unas verduras chinas, cuyas frescura puede apreciar a distancia.
Y contiguo, encontré una "huaca", como decimos por allá, de hierbas orgánicas y variedades de té. No se sabe cual escoger, primero porque no se conocen y segundo, porque la oferta es tan numerosa que lo mejor es rogarle a la propietaria, Lorna, que recomiende. Escogí "menta mezclado con te verde" pero ella, recomendó "Sun's Oolong" sin decirme lo que es, pero si, me dio a oler su aroma y hoy que lo saboree, me gusto por su suavidad. La explicación de los componentes del "té", emblemático de su herbario, es una mezcla de "Tie Kwan Yin" orgánico que significa "diosa de la misericordia" y el "Phoenix Dan Cong" orgánico también de la Provincia de Fujian, China; es uno de sus favoritos.
De allí fui al "Centro Financiero" y le pedí autorización a la administradora de una de las empresas, cuyo presidente conozco, para desde sus ventanas, tomar las fotos que les presento, ya que una foto vale más que mil palabras. Hay detalles que menciono en cada una que nos dan una dimensión de como New York, aprecia las áreas verdes, así como la importancia de los dos ríos que abrazan a Manhattan.
En uno de las mesas con diversidad de ofertas, incluso bellas pinturas, orquídeas y flores -sin olvidar que el frío ya esta crudo- encontré carteras de piel, producto artesanal nicaragüense. Bravo!
Estas son ferias elegantes, donde se puede degustar exquisitos manjares y vinos. Estoy con la curiosidad de averiguar los resultados monetarios, ya que se son tres días de trabajo y actividad, donde todos los que colaboran lo hacen gratuitamente. The Women's Association (Asociación de Mujeres) es quien patrocina y utiliza sus resultados en programas humanitarios, llevan 70 años celebrándola, ellas califican de "Outreach" esta actividad, que según el diccionario inglés-español, quiere decir: "Compromiso Social Comunitario".
De allí salí a degustar una hamburguesa con queso mozzarella y tocineta, que estaba sabrosa y barata, según los precios de esta ciudad, que a veces asustan, como una visita a la peluquería del laureado estilista, José Santaella, venezolano. que brilla en el Salón Alyssia de la Avenida Madison, entre las calles 88 y 89. Para los curiosos, lavado, corte y peinado, $ 156.oo y no son pesos.
Aquí los precios van de acuerdo a la localización y a veces con andar un par de cuadras, se economiza, tanto así, como para comenzar a tomarle gusto al recomendado ejercicio de caminar, pero por supuesto sin la tijera mágica de José.
Gracias por leerme. Hasta el El Archivo CCLXXXIX el próximo domingo 1 de diciembre , con el ruego de hacerlo circular entre sus amistades.
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