domingo, 10 de julio de 2016

El Archivo CDXXIX – ¡El Turista Necesita Protección!

El turista no es artículo de consumo, es un ser humano que se desplaza a tierras extrañas, y el mundo cibernético lo mantiene al día de cualquier incidente, sobre todo si involucra su destino.

Quien viaja con frecuencia sabe distinguir los incidentes y sopesa los riesgos, encuentra si el destino que ha perdido su norte en cuanto a su seguridad, de lo contrario, la fuente de viajeros a ciertos países de nuestro mundo iberoamericano se habría secado hace tiempo, pues somos irredentos y seguimos usando métodos policiacos de represión innecesarios.

México, una potencia turística a nivel mundial, es un ejemplo. A pesar de los graves problemas –tristes episodios de lesa humanidad– como el crimen insensato de los jóvenes estudiantes al Magisterio, el visitante sigue llegando; la razón es que México ha mantenido una promoción publicitaria a favor de sus más populares y sofisticados destinos, y ha mejorando sus servicios de seguridad con una infraestructura de calidad mundial, y sumando a la afectuosidad de su pueblo, mantiene ese flujo vital para su economía. México vigila muy de cerca el trato al turista, donde sonrisas y servicios es lo que conquista a quienes lo visitan y la Policía ha sido entrenada a proteger, no como en muchos otros países, donde son piratas a la caza y a la pesca.

Esta "cultura turística" no fue captada por otros destinos emergentes, donde cualquier "estornudo" repercute como un huracán, como por ejemplo en Nicaragua, donde recientes abusos de expulsar por caprichos políticos a 16 visitantes que han ingresado al país con sus documentos en regla, ha impactado al mundo turístico, llegando a qué países emisores de turismo publiquen advertencias a sus nacionales con planes para visitar Nicaragua, destruyendo de un tajo el trabajo y esfuerzo de años, de empresarios y el mismo gobierno, que ha promovido al país como un destino donde la sonrisa y el servicio profesional y amistoso es su tarjeta de presentación.

No estoy señalando culpabilidad o inocencia, pero si la falta de gobierno. No puede ser que un país que se caracteriza por ser excelente anfitrión deje que policías, inescrupulosos y serviles, destruyan la imagen que tanto ha costado mostrar. También, creyendo quedar bien con "Mi Comandante" –así se le llama popularmente al Presidente– destruyan su imagen de político que ha tratado de evitar la confrontación, ya que su experiencia le dice que ello no abona a su ambición de ser vitalicio, que es algo que al "turista o visitante" ni le va, ni le viene.

Centroamérica ha tenido su cuota de gobernantes que se consideran como la autoridad máxima por encima de toda ley, pero cuando le dieron espacio a la fragilidad del ser humano, de hacerse ensalzar por incondicionales, a quienes para mantenerlos fieles hay que permitirles abusos y poder de caporales, sus gobiernos, por más fuertes que fueran, colapsaron. La lección es que quien manda no puede permitir a nadie que abuse en nombre suyo, y si esto sucede, debe frenar los desmanes, pues todo pueblo tiene dignidad, por pobre o domesticado que esté, y al sentirse abandonado por el "gobernante", se siente a la deriva, y peor debe sentirse un visitante, que visita y espera comprensión, sonrisas, cooperación de sus anfitriones, no abusos y desmanes policiacos, ya que ningún turista, por más aventurero que sea, se expone a lo más temible del mundo: el abuso y terrorismo estatal.

Contrapuesto a esto (destruir una imagen trabajada) mencionamos algo que circuló por el mundo cibernético, un episodio que sucedió como consecuencia de la tragedia del 11 de septiembre. En Newfoudland, Canadá, específicamente en el Aeropuerto Internacional de Gander, ciudad donde los poco más de 10,000 residentes recibieron 6,700 pasajeros en horas, de todos los vuelos forzados a aterrizar en ese lugar, personas que fueron distribuidas en comunidades en un radio de 75 kilómetros, pequeños pueblos, Lewisporte entre ellos donde hospedaron al grupo de quien escribió este relato, utilizando escuelas secundarias, casas particulares y de campo, salones; algunos en camas y otros en sacos de dormir, todo lo hacían con eficiencia y deseo de servir; al final declaraban que fue una experiencia inigualable, como si hubiesen estado en un crucero, ya que todos en los grupos se conocían por su nombre, pero fue en el vuelo de Delta a Atlanta, donde un médico de Virginia, logró que le permitiesen usar el micrófono de abordo, para exaltar la hospitalidad que habían recibido de la buena gente de Lewisporte y que deseaba establecer un fondo fiduciario de becas universitarias para los estudiantes de secundaria, bajo el nombre de "Delta 15" –el número del vuelo–. Allí mismo, los pasajeros lograron reunir 14 mil dólares en donaciones, el proyecto ha sido tan exitoso, que ya el fondo paso a un millón y medio de dólares y ha ayudado a 134 alumnos en su educación universitaria en una década.

Dice la azafata que escribió el relato, que "solo quería compartir esta historia porque necesitamos buenas historias. Me da gran esperanza saber que algunas personas de un lejano lugar fueron amables con algunos extraños que, literalmente les cayeron del cielo"… "Esta historia confirma que todavía hay mucha gente buena en el mundo".

Hasta la próxima semana, con El ARCHIVO CDXXX, desde esta histórica y acogedora ciudad, Philadelphia!



MOVIMIENTO MUNDIAL DARIANO


El Movimiento Mundial Dariano saluda la Independencia de los Estados Unidos de América proclamada el día 4 de Julio de 1776 en Filadelfia, Pennsylvania, cuna de su emancipación.

A sus padres fundadores: Washington, Jefferson, Benjamín Franklin y otros, quienes forjaron de ideales de igualdad, derechos y libertad, vigentes en su constitución política, por la sabiduría de su contenido, ley suprema de la Nación, que rige el destino de los 50 estados, que albergan millones de seres humanos que vivimos en democracia, paz y libertad, bajo el poder de Dios.

Uno de sus grandes símbolos es la estatua de la libertad, saludada por el poeta universal Rubén Darío en su primera estadía en Nueva York en Mayo de 1893, a nombre de los inmigrantes del mundo:

“A tí nuestra Señora de la libertad.
A tí cuyas mamas de bronce alimentan
un sinnúmero de almas y corazones”.

Darío en su fecunda obra cosmopolita, canta a Walt Whitman el poeta nacional de esta noble y gran nación; dedica a los Estados Unidos el poema "Salutación al Aguila", escrito en ocasión de su representación diplomática en la III conferencia Panamericana en Rio de Janeiro, Brasil en Julio de 1906,

“Salud águila, extensa virtud a tus inmensos revuelos
que la Latina América, reciba tu mágica influencia”

Y en el poema Pax, leído por el Bardo en la universidad de Columbia de Nueva York en 1915, junta la bandera de Estados Unidos, con la de su Nicaragua natal:

“The Star Spangled Banner, con el blanco y azul”



movimientomundialdariano.com
Miami, Florida, 4 de Julio, 2016.

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