Dicen mis lectores, que es indispensable seguir desmenuzando los problemas que nuestros países enfrentan para asegurarle a la población una buena salud, ya que de ello depende la energía que necesitamos para salir de la pobreza, o sea convertirnos en naciones con una fuerza laboral sana y por lo tanto, productiva.
Primero, está la urgente necesidad de darle prioridad al presupuesto de nuestras escuelas de medicina, exigiendo al mismo tiempo profesores a tiempo completo que demanden disciplina profesional y alejen al alumnado de las interferencias políticas partidarias, que prostituyen la vida universitaria.
Es urgente que se homologuen los requisitos de los Colegios Médicos, por lo menos a nivel centroamericano, a fin de que nuestros galenos estén al día de los progresos de la ciencia, en una continua renovación de conocimientos y de esta manera recibir nuevas oportunidades en su profesión. Los Colegios Médicos de Centroamérica, deben ayudar y abogar a que sus colegas Nicaragüenses logren hacer realidad el suyo, ya que esto afecta a todo el istmo.
Si bien es cierto que tenemos unos hospitales que han recibido aprobación a nivel internacional, es casualmente este nuestro "Talón de Aquiles" en cuanto que la mayoría de ellos, no recibirían clasificación alguna, pues son clínicas que adolecen de la más elemental planificación para ser llamados Hospitales. No se trata de su tamaño, sino que han sido construidos sin sentido alguno de seguridad, la vieja y absurda costumbre de improvisar y la falta de un organismo que vigile y apruebe su diseño, construcción y operación, pues si existe, no cumple con su más elemental obligación, que es el de proteger la salud de sus ciudadanos, al vigilar los abusos hospitalarios.
Otros de los problemas es la aberrante creencia que un Hospital es un negocio, cuando en si es un servicio social, aun aquellos que se han construido con capital privado, que por lo general, son inversionistas que lo ven como una inversión para el bien ciudadano en general y no como un negocio productivo y especulativo.
Por lo anterior es que todo Hospital está en la obligación de ofrecer a la ciudadanía una eficiente "Atención de Emergencias", en la cual no se debe preguntar si el paciente tiene o no posibilidades económicas de afrontar los gastos, lo cual debe ser enfatizado, pues lo primero que los hospitales privados te exigen es "pasar por caja", que esta paralela a la entrada de la Sala de Emergencia.
Otros de los problemas, en cuanto a los hospitales privados, es el costo, en especial de las medicinas que a veces, abusivamente recetan a sus pacientes, así como las consultas de especialistas que por quince minutos, llegan hasta cobrar 250.ºº dólares por visita. Es indispensable que las Administraciones actúen como Auditores de estos cargos, que abultan el total de la cuenta final, que por lo general, está muy por encima del poder adquisitivo del 80 por cientos de sus pacientes.
¿Por qué tanto hablar de hospitales? se preguntarán, pues sobre los segmentos del turismo existentes el turismo de salud es uno muy atractivo, tanto para los anfitriones como para los huéspedes, mencionemos como ejemplo a República Dominicana, que está preparada para explotar esa rama ya que cuenta con la estructura física y con la plataforma médica necesarias, además de contar por más de dos años con la asesoría de especialistas en economía de la salud, en derecho, con expertos en calidad locales e internacionales para comenzar su plan de desarrollo sostenible de turismo de salud. Esto lo asegura Alejandro Cambiaso, presidente fundador de la Asociación Dominicana de Turismo de Salud.
"Estamos dando los primeros pasos en el país para implementar esta práctica. Es un tema que está muy alineado con la estrategia del presidente Medina de captar 10 millones de turistas para República Dominicana, de captar divisas y de diversificar el sector turismo.
Como país tenemos muchas ventajas estratégicas que van desde nuestra favorable ubicación geográfica (estamos cerca de Estados Unidos y Canadá), un clima favorable, paz social, servicios de salud con calidad y seguridad, especialistas formados en importantes instituciones norteamericanas y europeas con los debidos avales y credenciales y, de forma adicional y como ventaja competitiva, tenemos el tema de calidad express".
Argumenta Cambiaso, que procedimientos que en Estados Unidos podrían costar 150,000 dólares en su país alcanzarían los 17,000 dólares.
Las compañías de seguros médicos podrían incentivar el turismo de salud, ofreciendo primas más económicas con hospitales certificados y calificados, dice Cambiaso, existen protocolos internacionales que se encargan no solo de la atención médica del paciente, sino de los asuntos logísticos de su traslado, hotelería, recuperación y de asuntos inclusive financieros.
"Hay una organización mundial del turismo médico que dio los primeros pasos en ese sentido; sin embargo, hay muchos países con los cuales queremos relacionarnos como Costa Rica, México y Colombia que han hecho una gran labor en cuanto al turismo de salud" indica Cambiaso.
"Les ha permitido mejorar la percepción de calidad del país, trabajar en la formación de una marca país, reforzar las certificaciones y las membresías y elevar la calidad y la seguridad de los servicios de salud. A nivel local esto influye de forma positiva no solo en los potenciales turistas de salud, sino en que todos los dominicanos vamos a recibir servicios de salud de mayor calidad".
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