Alejandro Jose Gallard Prio
Nuestro mundo sobrevive de esperanzas para conquistar el futuro y es por eso, que un grupo de católicos nicaragüenses, miembros de la Parroquia de San Antonio de Monte Tabor, ubicada en El Crucero, Departamento de Managua, decidieron organizarse en una Hermandad, cuyos principios son, la caridad, la unidad, la fraternidad y el patriotismo, siguiendo los lineamientos de los “Knights of Columbus” (Caballeros de Colón), fundada en los Estados Unidos por el sacerdote, Michael J. McGivney en 1882 y nombrada en honor a Cristóbal Colón, un héroe para muchos católicos estadounidenses, ya que su designación como patrón fue en parte para eliminar divisiones entre los Católicos irlandeses y los católicos inmigrantes de otras nacionalidades. La orden es la organización de fraternidad de servicio católico más grande del mundo. La membresía está abierta a católicos practicantes y aunque no está bajo control directo de la iglesia, mantiene una fidelidad incondicional con su Santidad EL PAPA. Actualmente cuentan con 1.8 millones de miembros en el continente americano.
La fundación de la primera Hermandad de los Caballeros Católicos de Nicaragua, cuyo motivación principal es ser una sociedad de beneficio mutuo, se basa en los lineamientos del padre McGivney, que siendo párroco en una comunidad de inmigrantes, vio lo que podía pasarle a una familia cuando el sostén de la familia muere y quiso proveer un seguro para cuidar a la viuda y a los huérfanos dejados atrás. Él mismo vivió esa situación cuando tuvo que dejar sus estudios para hacerse cargo de la familia cuando su padre murió.
La caridad es uno de los principales principios en que se inspira la vida diaria de los Caballeros, ya que como pensaba el Padre Michael (1882), el catolicismo y el fraternalismo son compatibles, lo cual nos lleva a ser orgullosos de nuestra herencia católica.
Lo transcendental de la presencia de esta Hermandad en Nicaragua, es el poder construir una sociedad incluyente, donde se puedan vivir a plenitud los derechos humanos y civiles, aunados al espíritu cristiano de la caridad, la fraternidad y unidad ciudadana con un sentido constructivo del patriotismo.
Formaran parte de la historia, los que decidieron tomarse la tarea de reunirse en hermandad para difundir el don de la caridad, unidad cristiana y patriotismo que tanto necesita nuestro país, a fin de lograr erradicar la pobreza y la falta de valores, que nos detiene para cimentar el progreso y bienestar de nuestros coterráneos.
Los primeros Capellanes de la Hermandad, serán Fray Fernando Espinoza Pérez De la Parroquia de Monte Tabor y Rev. José Modesto López Calero, de la Parroquia Nuestra Señora de las Victorias, ambas ubicadas en la ciudad de El Crucero, Departamento de Managua.
La primera actividad de los “Caballeros”, será la visita al Arzobispo Metropolitano, Monseñor Leopoldo José Brenes Solórzano, para invitarle a que les guíe a cimentar ese esfuerzo, ya que una vez la Hermandad este debidamente organizada, el será su Capellán Nacional.
Los “Caballeros”, con la cooperación de sus párrocos-capellanes, se encargaran de incentivar a los católicos de Nicaragua, a que se organicen para trabajar unidos en una red de ayuda fraternal a nuestra feligresía, que a su vez logre la integración de la Hermandad a la Orden Internacional de “Los Caballeros de Colón”, quienes anualmente contribuyen con su aporte para complementar los esfuerzos de los Capítulos de los países en desarrollo, formando así un cadena fraternal de ayuda.
Este esfuerzo es muy significativo, ya que será por primera vez que una Hermandad Católica de Laicos a nivel mundial, dedicada exclusivamente a labores humanitarias dentro del espíritu cristiano de la caridad de la Iglesia Católica, se organice en Nicaragua, para trabajar fraternalmente y en unidad de propósitos para que ningún niño se quede sin educación y sin asistencia medica a nivel nacional. Una magna empresa que solo con el ejemplo de caridad y amor cristiano, que han practicado los “Caballeros de Colón” en sus 127 años de existencia, se podrá lograr.
El pueblo de Ayapal, nombre Miskito, localizado unos 190 kilómetros al norte de la ciudad de Jinotega, al noroeste de la Reserva Bosawas, ha recibido ayuda humanitaria de los “Caballeros de Colon”. Dos nicaragüenses, Onofre e Ignacio Gutiérrez, miembros de uno de sus capítulos en Alexandria, Virginia, organizaron las misiones que lograron construir una Escuela, Clínica, donando además una Estación de Radio y un vehículo todo terreno. También colaboran con la Restauración de la Iglesia, todo lo cual está bajo la supervisión del Obispo Fray Carlos Enrique Herrera Gutiérrez, distinguido por la Orden, como “Caballero de Colón Honorario”.
Es también conocida la ayuda que “Los Caballeros de Colón” prestaron a Nicaragua durante la tragedia del Huracán Mitch, así como esperamos, que con motivo de los estragos ocasionados por la tormenta tropical IDA, logremos recibir su cooperación para nuestros hermanos de la Costa Atlántica de Nicaragua y la República de El Salvador.
IMPORTANTE INFORMACIÓN: Ya está disponible en Internet, la Biblioteca Digital Mundial de UNESCO, a través del sitio: www.wdl.org
Hasta el próximo EL ARCHIVO LXV. FELICIDADES Y SALUD A TODOS!
La fundación de la primera Hermandad de los Caballeros Católicos de Nicaragua, cuyo motivación principal es ser una sociedad de beneficio mutuo, se basa en los lineamientos del padre McGivney, que siendo párroco en una comunidad de inmigrantes, vio lo que podía pasarle a una familia cuando el sostén de la familia muere y quiso proveer un seguro para cuidar a la viuda y a los huérfanos dejados atrás. Él mismo vivió esa situación cuando tuvo que dejar sus estudios para hacerse cargo de la familia cuando su padre murió.
La caridad es uno de los principales principios en que se inspira la vida diaria de los Caballeros, ya que como pensaba el Padre Michael (1882), el catolicismo y el fraternalismo son compatibles, lo cual nos lleva a ser orgullosos de nuestra herencia católica.
Lo transcendental de la presencia de esta Hermandad en Nicaragua, es el poder construir una sociedad incluyente, donde se puedan vivir a plenitud los derechos humanos y civiles, aunados al espíritu cristiano de la caridad, la fraternidad y unidad ciudadana con un sentido constructivo del patriotismo.
Formaran parte de la historia, los que decidieron tomarse la tarea de reunirse en hermandad para difundir el don de la caridad, unidad cristiana y patriotismo que tanto necesita nuestro país, a fin de lograr erradicar la pobreza y la falta de valores, que nos detiene para cimentar el progreso y bienestar de nuestros coterráneos.
Los primeros Capellanes de la Hermandad, serán Fray Fernando Espinoza Pérez De la Parroquia de Monte Tabor y Rev. José Modesto López Calero, de la Parroquia Nuestra Señora de las Victorias, ambas ubicadas en la ciudad de El Crucero, Departamento de Managua.
La primera actividad de los “Caballeros”, será la visita al Arzobispo Metropolitano, Monseñor Leopoldo José Brenes Solórzano, para invitarle a que les guíe a cimentar ese esfuerzo, ya que una vez la Hermandad este debidamente organizada, el será su Capellán Nacional.
Los “Caballeros”, con la cooperación de sus párrocos-capellanes, se encargaran de incentivar a los católicos de Nicaragua, a que se organicen para trabajar unidos en una red de ayuda fraternal a nuestra feligresía, que a su vez logre la integración de la Hermandad a la Orden Internacional de “Los Caballeros de Colón”, quienes anualmente contribuyen con su aporte para complementar los esfuerzos de los Capítulos de los países en desarrollo, formando así un cadena fraternal de ayuda.
Este esfuerzo es muy significativo, ya que será por primera vez que una Hermandad Católica de Laicos a nivel mundial, dedicada exclusivamente a labores humanitarias dentro del espíritu cristiano de la caridad de la Iglesia Católica, se organice en Nicaragua, para trabajar fraternalmente y en unidad de propósitos para que ningún niño se quede sin educación y sin asistencia medica a nivel nacional. Una magna empresa que solo con el ejemplo de caridad y amor cristiano, que han practicado los “Caballeros de Colón” en sus 127 años de existencia, se podrá lograr.
El pueblo de Ayapal, nombre Miskito, localizado unos 190 kilómetros al norte de la ciudad de Jinotega, al noroeste de la Reserva Bosawas, ha recibido ayuda humanitaria de los “Caballeros de Colon”. Dos nicaragüenses, Onofre e Ignacio Gutiérrez, miembros de uno de sus capítulos en Alexandria, Virginia, organizaron las misiones que lograron construir una Escuela, Clínica, donando además una Estación de Radio y un vehículo todo terreno. También colaboran con la Restauración de la Iglesia, todo lo cual está bajo la supervisión del Obispo Fray Carlos Enrique Herrera Gutiérrez, distinguido por la Orden, como “Caballero de Colón Honorario”.
Es también conocida la ayuda que “Los Caballeros de Colón” prestaron a Nicaragua durante la tragedia del Huracán Mitch, así como esperamos, que con motivo de los estragos ocasionados por la tormenta tropical IDA, logremos recibir su cooperación para nuestros hermanos de la Costa Atlántica de Nicaragua y la República de El Salvador.
IMPORTANTE INFORMACIÓN: Ya está disponible en Internet, la Biblioteca Digital Mundial de UNESCO, a través del sitio: www.wdl.org
Hasta el próximo EL ARCHIVO LXV. FELICIDADES Y SALUD A TODOS!
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