domingo, 26 de enero de 2020

El Archivo DCXXXV

Una Catedral de Sal en Zipaquirá, Colombia
No se trata de una atracción turísticas más, tampoco de un sitio más donde orar, aunque es algo tan impactante, que cuando vas entrando en el túnel, de repente, sientes una fuerza espiritual que domina tus sentidos, una combinación de temor y aventura por estar penetrando los interiores de la tierra, donde una vieja mina de sal se ha convertido en un refugio de oración, en una Catedral Católica, que el ingenio humano diseñó y construyó entre las rocas y el mármol impregnados de sal.

Huela la sal, te dicen, pruébela y he allí, como el guía resuelve el misterio, pues como sabemos la sal, aunque rocosa, es un polvo blanco que usamos para condimentar o preservar alimentos. La he visto en las salinas de los mares, pero nunca la había admirado convertida en una lámpara o en una figura angelical. ¿Roca o mármol impregnado de sal?


Y todo esto es al comienzo del túnel de entrada, que en mi caso, lo iba penetrando cómodamente sentado en silla de ruedas, ya que por lo disparejo del piso, mis anfitrionas decidieron proveérmela y contratar a un joven guía (por cierto venezolano, de los que ya se han afincado en Colombia) pudiendo así apreciar todo desde una perspectiva privilegiada.

Siempre encontramos filas, pues son muchos los que entran y salen. Tu primera sensación es de ansiedad, piensas "aquí hay mucha gente", pero te controlas por la expectativa a lo que esperas encontrar, por lo que ahora se el por qué desde que entras te dicen, tóquela, pruébela, es sal, con lo que los guías dominan tu inquietud.


Antes había una Capilla simple para los mineros construida en 1932, según datos de Wikipedia, la que se transformó en una primer Catedral, cuya construcción inició en el 50 e inaugurada en agosto del 54, para 8,000 personas. La nueva Catedral es un logro del Arquitecto bogotano Roswell Garavito Pears, electo entre 44 propuestas en un concurso de la Sociedad Colombiana de Arquitectos en 1990, la dirección técnica de ingeniería fue ejecutada por otro bogotano, el ingeniero Jorge Enrique Castelblanco, entre 1991-1995, todo en el interior de las minas de sal de Zipaquirá, en el departamento de Cundinamarca, Colombia, a 50 kilómetros del centro de Bogotá.

En su interior se encuentra una rica colección artística, esculturas de sal y mármol en un ambiente lleno de un profundo sentido religioso.


En 2007 mediante un concurso para elegir las 7 Maravillas de Colombia; la Catedral de Sal de Zipaquirá obtuvo la mayor votación; convirtiéndola en la Maravilla No.1.

Es interesante que el bajar hasta los 180 metros de profundidad, no causa efecto corporales, una proeza de ingeniería, lo cual permite a niños (los vi en coches de infantes) y a mis colegas adultos visitar la antigua mina, convertida en una de las atracciones turísticas más singulares del mundo.


Al entrar te da la bienvenida El Viacrucis, esculpido en la sal o en mármol empotrado en la roca salada, te invita a descansar y orar en cada una de las estaciones hasta llegar a la Nave Central, donde está la Cruz más grande del mundo bajo tierra y puedes participar de la Eucaristía cómodamente sentado en bancas de madera. Tuvimos la suerte que cuando llegábamos la Santa Misa estaba iniciando.

Viajamos de Bogotá en automóvil, pero se puede ir en autobús o en el tren turístico, el cual toma casi tres horas. La empresa ferroviaria ofrece bocadillos y variedad de bebidas durante el viaje. Les recomiendo el viaje por tren.


Esta joya arquitectónica y de ingeniería de minas, ofrece en su interior, un sector de compras impresionante. Es de admirar a los que permanecen por 8 horas a cargo de los servicios, pero como me dijeron ellos, el cuerpo humano es tan versátil que se acopla a todos los ambientes, aunque al salir, hay que desalinizarse.

En general los visitantes son grupos familiares de varias nacionalidades que permanecen en el recorrido un poco menos de dos horas, pero curiosamente también ofrecen facilidades para bodas y banquetes. Una empresa petrolera de Chile, contrató el lugar para una boda en el 2019, a la que asistieron 75 invitados de varios países. En el evento canto el coro de la Catedral y una orquesta filarmónica en la recepción y el banquete nupcial. Las autoridades anunciaron con debida anticipación el cierre al público en general.


Definitivamente les recomiendo visitar esta maravillosa joya que el ingenio colombiano le ofrece al mundo.

domingo, 19 de enero de 2020

El Archivo DCXXXIV

Bogotá, Distrito Capital de Colombia
Metrópoli donde casi 9 millones de seres humanos conviven en una meseta verde de cielos azul y blanco que cobijan sus plazas y parques floreados, "2600 metros más cerca de las estrellas" es su lema, muy apropiado por cierto, en un clima de eterna primavera.

Como nada es solo rosas, pues hasta estas llevan espinas en sus tallos, los capitalinos tienen que aceptar los inevitables tranques vehiculares a pesar de tener amplias y bien diseñadas vías y un eficiente transporte público, que tiene su propia vía independiente, el crecimiento en una meseta limitada por montañas que son su pulmón, los hace inevitables, así que, cuando lo visiten, acepten el lento tráfico para visualizar la vida cotidiana bogotana y admirar la energía de quienes se desplazan en sus calles en camiseta, como si estuvieran en el trópico caribeño (las temperaturas regularmente oscilan entre los 5 y 19 °C, con una media anual de 13 °C) y las novedosas patinetas eléctricas que aparecen por doquier.


Bogotá, es una metrópolis que ha ido creciendo guardando espacios entre edificios de altura moderada, 10 a 15 pisos la mayoría. Hay muy pocos rascacielos, el más alto es de 80 pisos. Su casco antiguo o colonial y edificios públicos, están bien preservados y le dan a la ciudad un señorío histórico muy singular.

Bogotá ha ido absorbiendo pueblos vecinos, espacio que se convierte, por lo general, en residencial, llevando consigo a centros de comercio, lo cual alivia el desplazamiento vehicular y ya que mencionamos transporte, nos dicen que están planificándose un metro elevado que en 5 años aliviará el tráfico.

La Capital se distingue por su limpieza, áreas verdes, educacionales (muchas universidades), entretenimiento y servicios. Aquí cabe un aplauso a los administradores que optaron por mantener la histórica Plaza de Toros y utilizarla para presentaciones artísticas.


Bogotá tiene un problema, el "grafiti". Filadelfia, ciudad histórica por excelencia de Estados Unidos, logro solucionarlo gracias a la voluntad del Alcalde Edward G. Rendell, que formó un ejército de limpieza que lo elimino y dio a la ciudad una bella colección de murales, incentivando así el arte, lo cual podría emular el Distrito Capital, contratando a desocupados de la reciente inmigración de venezolanos para embellecer la Capital que los ha acogido con el espíritu bolivariano que los une.

Museos como el del Oro, Botero y, el espectacular "tour" en tren turístico a la Catedral de Sal, unido a sus ofertas gastronómicas, es suficiente para visitar la Capital mejor diseñada y preservada de Sur América, desde donde salen varios vuelos diarios a ciudades del interior, convirtiendo a Colombia en uno de los destinos más diversos del Sur de las Américas.


En una visita de 5 días no es posible catalogar la oferta gastronómica bogotana, pero si recomendar un par de restaurantes, que por su excelencia, merecen mención honorífica: "El Patio", liderado por su dueño, Fernando Bernal, 15 mesas apretujadas en un espacio súper reducido, aunque lo escogimos al azar terminó sorprendiéndonos con un exquisito almuerzo mediterráneo con sabor italiano. Su comida es tan apetitosa y el servicio tan amable que regresamos. El otro se llama "BEIRUT", comida libanesa auténtica donde te hacen sentir en un restaurante de la inolvidable ciudad cosmopolita, reconocida por su excelente "cuisine". Cuando estén en Bogotá, les recomendamos visitarles.

Al finalizar la visita sucedió algo en el multitudinario aeropuerto "El Dorado" de Bogotá que dice mucho de la moral y ética del ciudadano colombiano. Antes de abordar el vuelo hacia CALI, fui al servicio higiénico y al salir, regresé a tomar la Silla de Ruedas que me llevo a la puerta de abordar, inconscientemente me busqué la billetera, descubriendo que no la tenía. Mi primera reacción fue: ¡que lástima! –Imaginé nunca recuperarla– pero siendo optimista le pedí al auxiliar, que conducía mi silla de rueda, que fuera corriendo al Restaurante donde creía que la había dejado. A los pocos minutos regresó con ella en la mano, y no tuvo que buscarla, un señor que estaba a la salida del Baño, al verlo le preguntó: ¿usted andaba con un señor de barba? vi cuando se le cayó su billetera, pero no pude alcanzarlo, por lo que le ruego llevársela. Un milagro, diríamos algunos, pero en verdad, es algo más, es una demostración de honestidad ciudadana, tanto de la persona que la encontró, como del joven que me la entrego, para quienes pido mucha bendiciones.


En próximo Archivo, escribiré sobre mi visita a la impresionante Catedral de Sal.

domingo, 12 de enero de 2020

El Archivo DCXXXIII

Colombia, el Destino Turístico del 2020
Para comentar sobre Colombia, país diverso y extenso, es necesario escribir reportajes cortos para describirlo y lograr interesar al lector para que nos acompañe en los viajes, por lo que decidimos presentarle un bosquejo de lo que será una serie de reportajes de las ciudades o pueblos fáciles de acceder, dejando para un futuro, aquellos lugares exóticos que demandan planificación y tiempo (la aventura) en la cual también tienen mucho que ofrecer, sobretodo en el departamento de Amazonas.

Actualmente, resido en el bello Valle del Cauca, en las afueras de Buga, una ciudad colonial que data de 1554, donde se encuentra la Basílica de "Nuestro Señor de Los Milagros", es un santuario de peregrinación y desbordante turismo religioso de nivel internacional. Buga además de acogedor es muy representativo, de lo que, en mi opinión, le da a Colombia una diversidad turística muy especial, pues estas pequeñas ciudades y pueblos pintorescos proliferan alrededor de las grandes urbes.


Colombia es una mezcla de trópico caribeño y la Cordillera de los Andes, que en Colombia, forma un macizo seccionado en 3, Central, Occidental y Oriental. La Central está separada de la Occidental una distancia promedio de 400 m por una falla geológica ocupada por el río Patía al sur y por el río Cauca al norte. La Oriental se separa gradualmente hacia el este creando la cuenca del río más importante de Colombia, el Magdalena. Las tres cordilleras tienen picos principalmente de formación volcánica de más de 4000 msnm, muchos activos. La Central y la Oriental tienen picos de más de 5000 msnm cubiertos de nieves permanentes. Las faldas forman valles y mesetas de tierras fértiles que reciben las aguas de ríos que bajan de sus montañas, con la que riegan una permanente producción agrícola y pecuaria, además de espacios donde se han desarrollado ciudades, pueblos y comunidades con vida propia, que forman un enjambre comunitario entrelazados por magnificas carreteras, aunque dificultosas siempre las mantienen en buen estado, usando el sistema de peaje.


Lo anterior nos demuestra que existe mentalidad empresarial que se refleja en el sector gobierno, donde por lo general el desarrollo va por delante de cualquier interés ideológico o partidario, esto les ha permitido crecer y cimentar su economía, a pesar de la larga guerra fratricida, fomentada y financiada, por intereses foráneos entre los que juega un rol especial el narcotráfico, pues han visto en Colombia una joya a conquistar –por no decir destruir– como parte crucial en su industria homicida.

Colombia es una democracia sostenible, a base de educación, profesionalismo y la responsabilidad de un sector privado constructivo que apoya el bienestar de su fuerza laboral manteniendo fuentes de trabajo formales y mucho trabajo informal, esto, sumado al buen sistema de salud, consolida este país de 50 millones, que no para de aumentar. Un exportador agropecuario e industrial que ha penetrado el mercado mundial, con puertos en el Atlántico y el Pacifico, ofreciendo al mismo tiempo al consumidor nacional productos de calidad a precios asequibles.


Colombia ha demostrado además un sólido futuro en el turismo receptivo en sus ciudades, como su capital, Santa Fe de Bogotá, que con 8 millones de habitantes ofrece un sabroso clima de montaña, gastronomía internacional, un extraordinario "Museo del Oro" y a 40 kilómetros, la Catedral de Sal de Zipaquirá. Medellín, con tres millones, modelo de progreso a nivel continental; la sofisticada Cartagena, con un millón, sofisticada joya colonial. Los puertos de Barranquilla, con 1,2 millones y Santa Marta, con medio millón, aledaña a la Sierra Nevada y costas en el Mar Caribe, donde la naturaleza realza su esplendor en medio de asentamientos indígenas, donde nació el Vallenato, un género musical autóctono de la Costa Caribe Colombiana. El famoso festival del Vallenato se realiza anualmente en la ciudad de Valledupar, Departamento de El Cesar.

El fértil Valle del Cauca y su cosmopolita Capital, Santiago de CALI, con 2,4 millones de alegres residentes, puerto de entrada a América del ritmo de la "Salsa", que se acopla a su pujante comercio e industria y su exitosa Feria Anual Internacional.


Cúcuta y Bucaramanga, ciudades cercanas de la frontera venezolana, que crecen vertiginosamente por el éxodo político del desastre del Socialismo XXI.

Poco a poco les iremos dando reportajes que esperamos les motiven a visitar Colombia, un país en que las fuerzas de la paz se han mancomunado con el turismo, esa gran fuente de paz, lo que le ayudará a crecer y desarrollarse para el bienestar de su pueblo y orgullo de las Américas.

domingo, 5 de enero de 2020

El Archivo DCXXXII

Y los Padres, ¿Dónde Están?
Una pregunta que ha sido el enigma de generaciones: ¿dónde están los padres de esos hijos que tan heroicamente protegen y defienden las madres? Una de las razones seria que algunos de ellos permanecen encarcelados, otros ocultos huyendo de la persecución o en el exilio por falta de oportunidades, pero con estas respuestas no resolvemos el enigma.

Si revisamos la historia del sufrimiento de los países latinoamericanos, siempre encontramos al sector femenino, heroico y maternal con su lucha protectora de sus seres queridos, sin sus compañeros, los padres, y no hablamos solo de las madres solteras, quienes son las victimas más afectadas del mal llamado "machismo", una más de las taras sociales que han mantenido a nuestros países en el atraso social y económico, aunque hay que admitir que en esto la ignorancia de nuestras jóvenes mujeres pesa en ese desajuste familiar, que valientemente enfrentan al asumir la jefatura familiar, duplicando sus obligaciones heroicamente, por eso decíamos en El Archivo pasado que "Las Madres, son seres de férrea voluntad, son esperanza, son vida y por sobre todo, amor".


Si en sus luchas, pan de cada día, tuviesen a su lado un esposo o compañero, los corruptos criminales que las persiguen y acosan recibirían el mensaje de que hay unidad familiar, disposición a la defensa, a reclamar con más fuerza sus derechos, familiares y de mujer, a enfrentar con dignidad cívica el caos del populismo que paraliza el desarrollo de los pueblos.

El emprendurismo familiar es vital y es en él, gracias a Dios, que sobresale la mujer sola, por eso es que se necesita incentivar al hombre, especialmente a nuestra juventud, a tomar el reto de apoyar a la mujer, acompañarla en su lucha diaria, y así lograr dentro de la fuerza del núcleo familiar la unión tan necesaria para triunfar, para así salir del miasma económico y social que nos mantiene atascados.


La semana pasada el diario español "El País" nos informó sobre mujeres decididas a "ser" algo más que amas de casa. Tania Alonso y Juan F. Samaniego nos relatan historias de emprendedoras del departamento fronterizo con Panamá del Pacifico colombiano, Chocó, donde los "chocoanos" –en su gran mayoría de ascendencia africana– han vivido durante décadas mirando al mar… y las oportunidades de su futuro en forma de pesca y turismo…"Una realidad en la que el papel de la mujer es cada vez más importante… tomando la iniciativa y formándose para emprender, organizarse y sacar partido a los infinitos recursos… en un lugar donde la selva se mezcla con las aguas del Pacifico… (donde sus) objetivos son impulsar el desarrollo de sus comunidades y avanzar en el empoderamiento femenino"… relatándonos "historias de varias colombianas que, de la mano de su comunidad, están cambiando la realidad en la que viven y cumpliendo sus sueños de independencia y autonomía".

"En la costa de Nuquí se encuentra La Posada Turística de Chachita, una cabaña con vistas al océano escondida entre los manglares. Chachita es el nombre con el que se conoce a Ruthnibet Martínez Caizamo, líder comunitaria que está detrás del proyecto Posadas Nativas Corredor Turístico Arutepa… tiene una red con varios alojamientos. El sendero por los manglares que conduce a una de ellas lo hizo junto a su familia. 'A hombro'. Detrás de tanto trabajo hay un objetivo: el de formar una red de establecimientos por todo el Chocó que funcionen como empresas responsables con la comunidad y la naturaleza y mediante las cuales los nativos puedan valerse por sí mismos… fomentar un turismo sostenible manteniendo la autenticidad de los habitantes locales".


Finalmente nos aleccionan: "Si nosotros no empoderamos a las comunidades, este turismo lo desarrollará otro y se llevará toda la riqueza que tenemos. Pero una golondrina no hace el verano, hace falta que estemos todos", que es casualmente nuestra inquietud al decir: Y los PADRES, los "machos", cómo a veces se identifican los que duermen en hamacas, bebiendo aguardiente, ¿DÓNDE ESTÁN?

Nota: Todas las fotos son de "Chocó.